“Lo que está dentro es sin igual, emana desde un espacio muy pequeño donde la Primera Vibración de lo No Manifestado surge en el esplendor de Un Mundo Divino”
Hakomi Poema Cámara Cuatro
Proyecto Hakomi: Cámaras Cuatro a la Seis, 2003
Proyecto Hakomi: Cámaras Siete a la Doce, 2005
Proyecto Hakomi: Cámaras Trece a la Veintiuno, 2005 no en CD
Como se muestra en la lista, la última oferta no está en CD. Sin embargo, estas colecciones están disponibles para descargar en la sección de música y comprar en la sección de productos de la página web de los WingMakers.
Proyecto Hakomi—Música de las Cámaras Cuatro a la Seis
• Los efectos positivos y negativos de la música en el Instrumento Humano
• El poder de la música y el sonido para inculcar una conexión con el espíritu
• La relación de los mantras con las frecuencias profundas de la Primera Fuente
• La expresión de la Primera Fuente de luz y sonido
• La creación de una zona de Interfase entre el Instrumento Humano y las vibraciones ordinarias del mundo externo de las formas
Como se puede ver, este breve artículo cubre mucha información, pero todo se reduce a la restauración de nuestra conexión con la naturaleza unificadora del espíritu. Como lo indica James: "La música de Hakomi Cámaras Cuatro a la Seis pretende restaurar y apoyar este sentido de reconexión" (*)
El título del artículo en sí mismo implica la naturaleza unitiva de la realidad en todas las dimensiones. La conciencia es evolutiva y coherente por naturaleza. El aspecto evolutivo de la conciencia es un hecho establecido de la psicología y la sociología moderna. La coherencia de la consciencia está aflorando ahora mientras los campos de la psicología y la sociología estudian la necesidad de integración psicológica e integración social. La integración implica armonía y equilibrio, y estos son factores cruciales tanto en nuestra vida personal como en nuestras relaciones sociales. Basta solo acceder a las noticias del mundo para ver la amplia gama de relaciones desarmónicas y fracturadas repartidas en nuestro planeta. La buena noticia es que muchas personas reconocen la crítica necesidad de tomar medidas para la creación de correctas relaciones humanas en muchas áreas de la vida —la necesidad de comprensión y armonía entre todos los pueblos.
A nivel del Soberano Integral, la coherencia de la consciencia, sobre la comprensión del Soberano Integral de sus muchas experiencias de encarnación en el universo espacio-tiempo, se describe mejor en las muchas referencias de los escritos de James. Todas las experiencias y los saltos de desarrollo en la conciencia del Instrumento de Humano se transfieren a la Entidad en la que todas éstas están integradas en una visión completa y coherente.
Aquí debemos hacer hincapié en que la conciencia de la Entidad es ilimitada en su conocimiento de las numerosas encarnaciones, pero la conciencia inferior que experimentamos a través de nuestros instrumentos humanos es muy limitada. Metafóricamente, el viaje de la Entidad a través de los mundos del espacio-tiempo es como un libro inacabado que aún se está escribiendo. Nuestra vida actual, sin embargo, es sólo un capítulo en este libro en curso, y nuestras vidas pasadas son capítulos anteriores. Nosotros, mientras estamos en nuestros Instrumentos Humanos, sólo somos conscientes del capítulo actual, ya que se está escribiendo, mientras que el Soberano Integral es consciente de todos los capítulos hasta el presente. Podríamos decir que el autor Soberano Integral ya ha trazado toda la trama del libro. En nuestro nivel de conciencia este libro no es coherente, ya que hasta el momento no podemos examinar el flujo más grande de la historia. La obra de James y la de los otros maestros Lyricus es que nos guíe a una comprensión más completa de la naturaleza cohesiva de nuestro Soberano Integral del libro en curso.
Parte de la razón por la que tenemos una comprensión muy reducida del desarrollo evolutivo de nuestro Soberano Integral es que estamos abrumados por las vibraciones disonantes de nuestra existencia en el mundo de la forma. Las pistas de música de Hakomi cuatro a la seis están diseñadas para limpiar una zona de armonía, llamada la Zona de Interfase. Esta zona se encuentra entre las vibraciones discordantes entrantes del mundo exterior y las partes físicas, emocionales y mentales que componen nuestros Instrumentos Humanos.
El sonido espiritual ayuda a crear una Zona de Interfase entre el instrumento humano y la sopa vibratoria del mundo de las formas. Esta Zona de Interfase apoya la misión y el propósito del instrumento humano, evitando su contaminación vibratoria como un recipiente para el alma humana y una salida para la expresión de Luz y Sonido de la Primera Fuente, o lo que se conoce en ocasiones como Para Vach.
Para Vach es lo primordial, el causal de Luz y Sonido que trasciende tanto la manifestación como la no manifestación. Es el Aliento de la Primera Fuente más allá del cosmos, que crea, vitaliza, y pone en movimiento la sustancia vibratoria de la materia.(*)
Este pasaje explica que estamos conectados inherentemente a las vibraciones de luz y sonido de la Primera Fuente. La Zona de Interfase es un "recipiente de la Entidad", así como una salida para el Para Vach. Fue creada, al menos en parte, por un sonido espiritual que trasciende todas las dimensiones del multiverso, ya sea en el espacio-tiempo o no espacio-tiempo. Como explica el artículo, el problema es que nuestra Zona de Interfase está cerrada debido a las vibraciones discordantes de nuestro entorno. La Zona de Interfase puede limpiarse con la música.
La armonía es el principio gobernante de la Zona de Interfase, y la música —adecuadamente sintonizada— puede ayudar a crear, dirigir, y sostener este sentido de armonía. Si la Zona de Interfase es correctamente manejada brindará un amortiguador entre el alma humana y los mundos de las formas que ejercen presión sobre ésta.
Además, James no está afirmando que su música sea el único medio de limpieza de la Zona de Interfase, pues dice que:
La música sagrada, los cantos, los mantras, y las vibraciones armónicas son el efecto compensatorio de esta densidad vibratoria, y es la manera más potente en el sentido de dirigir y sostener la armonía inherente de la Zona de Interfase que nos rodea a cada uno de nosotros. En un estado meditativo, el sonido de la voz de uno cantando un mantra o el nombre sagrado de la Primera Fuente es muy poderoso, particularmente si uno está visualizando e imaginando activamente una Zona de Interfase armoniosa. (*)
Aunque dice que el sonido de la voz de uno cuando está en un estado meditativo tiene un poderoso efecto, lleva esto al siguiente nivel en el siguiente párrafo:
Hay líneas de melodía incrustadas dentro de la música de las Cámaras Hakomi 4-6 que pueden ser internalizadas y usadas como una “escoba” armónica para barrer las vibraciones más densas que pueden acumularse dentro de tu Zona de Interfase. Este procedimiento no requiere una buena voz, y de hecho, pueden ser más potentes si se expresan dentro de tu conciencia en lugar de hacerlo por medio de tus cuerdas vocales y boca.(*)
Aquí, James nos está diciendo que además de escuchar la música físicamente, también podemos recordar los pasajes musicales que nos parezcan los más bellos y edificantes. Ambos métodos tienen el mismo efecto. Esto también implica que todo el CD contiene las frecuencias armónicas que ayudan a eliminar las vibraciones discordantes del mundo que contaminan la Zona de Interfase. Con toda probabilidad, este movimiento también se aplica a la música sacra anteriormente mencionada, a los cantos y a los mantras.
Entonces, ¿cómo podemos determinar el estado de nuestra Zona de Interfase? El primer paso requiere que estar presente en el momento. Si estamos conduciendo un coche o preparando una comida, por ejemplo, pero pensando en otra cosa entonces no somos plenamente presentes y conscientes de lo que estamos haciendo en el presente. He aquí un extracto de la transcripción de la entrevista de audio de Mark Hempel con James.
James: Sólo en las corrientes de amor te das cuenta de que no eres la forma que animas, sino más bien las frecuencias energéticas de la animación en sí misma. Y estás frecuencias —¿de dónde crees que proceden?
Mark: Creo que diría de la Primera Fuente
James: Si, de nuestro Creador. Y estas frecuencias bailan en el momento, ellas no conocen el pasado ni el futuro, ellas viven en el ahora. Así que los pensamientos y sentimientos que buscan en el pasado o en el futuro, pueden restringir la circulación de estas delicadas frecuencias, y estas frecuencias, como el flautista [de Hamelin], te conducen hasta el punto, hasta el mismo momento en que estés abierto a la transformación. Ahora bien nosotros tenemos un refrán que dice: “Si estás pelando una naranja no pienses en una manzana.” [El énfasis es mío] En otras palabras, permanece en el momento, porque es ahí donde las frecuencias de animación ocurren. Ahí es donde yace tu poder. (*)
A pesar de que no se hace referencia directamente a la Zona de Interfase, James puede estar describiendo la presencia continua de "frecuencias" relacionadas con Para Vach. La sugerencia a esta suposición se establece en el uso de la palabra "animación" en este segmento de la entrevista. Su descripción de la fuerza de animación de la Primera Fuente es paralela a su descripción del Para Vach citado anteriormente: "Es el Aliento de la Primera Fuente más allá del cosmos que crea, vitaliza, y pone en movimiento la sustancia vibratoria de la materia." Esta es muy probablemente la animación que James describe en la entrevista.
En consecuencia, si hemos de tomar conciencia de nuestro estado de conciencia que se refleja en la condición de la Zona de Interfase, entonces cuando estemos pelando una naranja no deberíamos pensar en manzanas o para el caso, cualquier otra cosa.
Una vez que estamos en el momento podemos aprender a evaluar el estado de nuestra Zona de Interfase. ¿Nos sentimos conectados con el simple placer de pelar una naranja o estamos agitados por pensamientos y sentimientos relacionados con el entorno y las actividades que tienen lugar dentro de él? Estos pensamientos pueden ser agradables o desagradables, pero estos también pueden ser observados en el momento, al igual que el pelado de la naranja. Este enfoque Zen a la vida es lo que nos sitúa de lleno en la Zona de Interfase y nos permite ser testigos de su estado.
A partir de este punto tenemos la oportunidad de cambiar nuestra conciencia a un estado expandido, más inclusivo e integrado de coherencia. El Proyecto Hakomi Cámara Cuatro a la Seis está codificado con frecuencias para ayudar a aclarar la Zona de Interfase de la confusión de sentimientos y pensamientos generados por las frecuencias discordantes que nos bombardean.
Así que, ¿cuál es la naturaleza de la Zona de Interfase que se nos insta a crear? Puede considerarse como un espacio psicológico erigido entre las estimulantes entradas de nuestro entorno (detectadas por los cinco sentidos), junto con las memorias almacenadas y las asociaciones de la mente. Se accede a este espacio subjetivo permaneciendo en el momento como un observador o testigo del estímulo sensorial entrante. Permitiendo que nuestros sentidos comuniquen plenamente el objeto de observación, nosotros, en calidad de observadores, sin los juicios preconcebidos de la mente como sirvientes para el ego, podremos ver la situación desde un punto más elevado del ser. Este es el siempre presente aspecto de una gran personalidad, el Soberano Integral, con su conexión inherente a la Primera Fuente.
Muchos más detalles sobre la Zona de Interfase se proporcionan en el quinto Discurso de los Lyricus "La Zona de Interfase", que James lanzó poco después de la publicación de "Coherencia de la Consciencia Evolutiva." Si bien la información en esta introducción está todavía fresca en tu mente, quizás quieras leer el quinto discurso, así como mi introducción al mismo.
Proyecto Hakomi—Música de las Cámaras Siete a la Doce
y de las Cámaras Trece a la Veintiuno
La música de estas versiones es hermosa y conmovedora, y aunque no hay ensayos o pistas específicas asociadas con estas composiciones, estas pueden estar de alguna manera codificadas. En consecuencia, seguimos por nuestra cuenta para intuir los efectos que estas composiciones pueden tener en nuestros cuerpos, corazones y mentes. Tal vez la falta de comentarios de James sobre estas versiones es deliberada, de forma que sigamos por nuestra cuenta midiendo nuestra sensibilidad a las sutiles vibraciones de esta música.
John Berges, Obras Completas de los WingMakers